Cómo te sientes?
Todo es diferente. Cuando acabó la operación y me desperté, pensé que algo iba mal y que me había despertado en mitad de la intervención. Cuando sientes como si dos vigas te atravesaran la espalda, cuando tienes la sensación de haber caído de un 7º en obras y haberte incrustado en los escombros, tienes la esperanza de que algo falte por acabar. Pero el mundo se te viene encima cuando te dicen: no, ya ha acabado todo, ha ido bien. Bien? En serio? Que alguien me mate, por favor. Eso pensé, allí en la UVI, con tubos por todas partes, alguien explicándome cómo administrarme la morfina y la sensación de que una pesadilla comenzaba. Luego te pasas más de un mes sin poder ir sola ni a hacer pis, porque tu cuerpo no te permite hacer un movimiento tan complejo como bajarte y subirte las bragas. No puedes ni ducharte sola. Y realmente te sientes humillada. Sabes que todo pasará, pero eso no evita el sentimiento. Ayuda para todo, levantarte de la cama, vestirte, peinarte… Tu cuerpo no es tuyo. ...